Las personas trabajadoras del Servicio Aragonés de Salud sabemos perfectamente, que este año hemos tenido menos contratación para cubrir el periodo vacacional.

Si bien es cierto (y menos mal) que la 5ª ola ha sido más suave que las anteriores, también es cierto que se ha tenido que cubrir las vacaciones del personal contratado durante el último año, además del personal fijo.

El pasado viernes día 10 de septiembre en las Cortes de Aragón, IU pregunto a la Consejera de Sanidad acerca de la falta de contratación en el SALUD. Según la Consejera no existe problema de presupuesto ni falta de contratación en la Sanidad Aragonesa, sentimos decirle que sí, y que ya está bien.

Supervisor@s y Servicios de Personal no sabían ni a dónde acudir. Compañeras que se incorporan después de bajas maternales y se acogen a su derecho de reducción de jornada, ya han sido avisadas desde las direcciones correspondientes de que esas reducciones no se van a cubrir con personal contratado, dejando servicios con menos presencias y recayendo el trabajo en el resto de personal.

Director@s de Gestión que no saben ni por donde les da el aire, Juntas de Personal solicitando información acerca de los recortes de personal y la dificultad en la contratación.

Así es como se está gestionando los Recursos Humanos de la Sanidad Pública Aragonesa desde su Departamento (Consejera Ripollés) y desde el Gobierno de Aragón (Presidente Lamban).

Parece ser que ustedes tienen menos problemas a la hora de gestionar conciertos con la Sanidad privada.

Está quedando meridianamente clara su voluntad política, dejar sin recursos una Sanidad Pública bastante deteriorada y cansada. Deteriorada sobre todo en cuanto a la atención al paciente, listas de espera tanto quirúrgicas como de consultas de A Especializada y en A Primaria, y cansada en cuanto a unos profesionales que, con unos recursos y un personal recortado, están sufriendo una pandemia que continua evolucionando con sucesivos brotes y distintas cepas de la enfermedad.

 A pesar de los avances tenemos por delante grandes incertidumbres y es necesario apostar por la Sanidad Pública y sus profesionales.

 Tristemente queda de manifiesto, su incapacidad para gestionar nuestra Sanidad porque, no lo olviden, aún es la Sanidad de TODAS.