Los ‘call centers’ subcontratados por Telefónica se vacían por la deslocalización a otros países

Los ‘call centers’ subcontratados por Telefónica se vacían por la deslocalización a otros países

El sector de los centros de llamadas aumenta su precarización. En los últimos años, se han perdido miles de empleos y ha afectado a empresas emblemáticas como Abai, Atento o Teleperformance. Concentrix sufrió a finales de 2024 un ERE que supuso el despido de 70 personas. Solo en Zaragoza capital se han perdido más de 500 puestos de trabajo en los últimos años, sin que nadie haga nada por frenar esta deslocalización.

CGT alerta sobre la crisis que padece el sector y el incremento de la deslocalización a otros países y la precarización laboral, ya que muchas teleoperadoras —la gran mayoría son mujeres— están cobrando el Salario Mínimo Interprofesional. El convenio firmado el año pasado deja a la categoría más baja y la más común, la de teleoperador, con un sueldo que acaba de llegar al SMI: 1.184 euros mensuales brutos en 14 pagas.

Parte de la atención de Telefónica, tanto en Movistar como en O2, se está trasladando a Colombia, donde las trabajadoras cobran menos y tienen condiciones laborales aún más precarias que las ya de por sí existentes en el sector.

Este desmantelamiento se produce por parte de «grandes multinacionales, con beneficios millonarios, que disponen de plataformas de atención al cliente en terceros países a las que derivan las llamadas y gestiones que se venían realizando en ciudades como Zaragoza, simulando así una bajada de la carga de trabajo para poder promover un ERE o un ERTE».

Paloma, presidenta del Comité de empresa de Abai y miembro de la CGT, también denuncia que su empresa está deslocalizando a Colombia los servicios que ofrece. «Por las ofertas de trabajo que estamos viendo, está ofreciendo empleo, para los mismos servicios que nosotros realizamos, en un nuevo centro de llamadas en la localidad colombiana de Pereira, donde ofrecen 42 horas semanales cobrando dos tercios menos que nosotras, que estamos cobrando el SMI», explica. Además, señala que «a nuestras trabajadoras les están sometiendo a estrés con la estrategia de que se vayan. En Zaragoza hemos perdido más de 500 puestos de trabajo en los últimos años, en León la empresa quiere aplicar una movilidad geográfica a Barcelona a 40 trabajadoras, en Madrid hay más de 120 personas en ERTE. ERTE que un juzgado ha declarado nulo recientemente, porque como defiende CGT no hay ninguna disminución de la carga de trabajo. La situación y la presión continua es insostenible.».

Ante esta situación, CGT reclama medidas urgentes para evitar las deslocalizaciones y la pérdida continuada de empleos en el sector de los centros de llamadas.