CGT anuncia una campaña de movilizaciones contra las multinacionales que reprimen y castigan el sindicalismo combativo
La organización anarcosindicalista asegura que OPEL ha despedido a un trabajador por ejercer su derecho a la acción sindical durante más de 25 años y se niega a dialogar para buscar una solución alternativa al despido
CGT presenta un calendario de movilizaciones que comenzará el próximo 8 de septiembre en Zaragoza, con convocatorias en diferentes ciudades del Estado español
La Confederación General del Trabajo (CGT) ha emitido un comunicado, tras la celebración de una rueda de prensa por el compañero despedido en julio, en el que explica las circunstancias del despido de César Yagües, trabajador de OPEL y delegado sindical con una trayectoria laboral y sindical de más de 25 años en esta multinacional.
En la rueda de prensa, César Yagües (Sº General de CGT Aragón-La Rioja) y Miguel Fadrique (Sº General de CGT) han coincidido en que el sindicalismo que una organización como la CGT practica en los centros de trabajo donde tiene representación, es castigado y perseguido por ser una amenaza contra los abusos de la patronal y sus políticas neoliberales.
Los anarcosindicalistas consideran que la base del sindicalismo que practica la CGT es la solidaridad, el apoyo mutuo y la acción directa, y por esto la campaña de movilizaciones que se plantean para las siguientes semanas contará con el apoyo internacional del sector de la automoción, en el que la organización ácrata lleva participando desde hace décadas.
CGT considera que OPEL, una multinacional que recibe por parte del Estado español importantes subvenciones públicas, ha aprovechado los meses de verano para llevar a cabo el despido de Yagües. En este sentido, el anarcosindicalista cuenta con una importante trayectoria laboral de casi 30 años en OPEL, y más de 25 años como delegado de CGT en la misma. Miguel Fadrique ha recordado que César ha sido muy activo en OPEL denunciando aspectos relacionados con las condiciones precarias de las plantillas, casos de amianto, abuso de horas extra y la degradación de las condiciones laborales de los trabajadores y las trabajadoras de la empresa.
Por todo ello, desde CGT consideran que el despido de César es un claro y directo ataque al sindicalismo combativo y de clase, como el que desempeña la organización rojinegra y que es una de sus señas de identidad más importantes. Es por eso, que el Secretario General, Miguel Fadrique, ha admitido no tener ninguna duda de que la única pretensión de OPEL es frenar la acción sindical de CGT y que por eso la organización responderá contundentemente para lograr la readmisión de Yagües y recordar, una vez más, a las grandes multinacionales que los derechos y las libertades de las personas trabajadoras son conquistas a las que no van a renunciar.