Es hora de la responsabilidad

La cuarta ola de la pandemia de COVID está impactando de manera muy negativa en Aragón, en donde las cifras de contagios de los últimos días son preocupantes, mientras que la positividad se mantiene por encima del 17%.

Ante este escenario, el Departamento de Educación se comporta de espaldas a la realidad. Para CGT el mantra de que en la escuela no se producen contagios debe ponerse en cuarentena. Si atendemos a la cuarta ola del estudio de seroprevalencia del Ministerio de Sanidad de diciembre de 2020, el colectivo docente es, con entorno a un 11%, el tercero en contagios tan sólo por detrás del personal sanitario y el de atención domiciliaria.

Según los datos oficiales, durante el primer trimestre de curso se alcanzaron casi los 900 docentes contagiados, mientras que los contagios por COVID han obligado a que esta semana las aulas cerradas hayan pasado de 9 a 34, casi cuatriplicándose.

El celo del conjunto de la comunidad educativa está siendo ejemplar, pero no podemos sino denunciar la irresponsable política del Departamento en materia de seguridad laboral.

Estos alarmantes datos, junto la ineficaz gestión del Departamento, ponen en duda la idoneidad del retorno a la presencialidad impuesto por la consejería a partir de febrero. Desde CGT criticamos que se pretenda retornar a la presencialidad en 3º, 4º de Eso y 1 de Bachillerato sin haber tomado previamente las medidas oportunas, como la habilitación de nuevos espacios, la reducción de ratios y el incremento del profesorado. Es más, resulta sorprendente que en las nuevas instrucciones no se concrete la distancia de seguridad, previamente establecida en 1,5 metros, lo que genera nuevas dudas sobre las intenciones y capacidades del Departamento. En este sentido, los próximos días desde CGT se va a ampliar la denuncia presentada a Inspección de Trabajo por vulnerar la seguridad del colectivo docente, incluyendo las nuevas condiciones derivadas de la presencialidad completa.

La improvisación del Departamento va a generar masificación en las aulas de numerosos centros, tal y como están poniendo de manifiesto diversos equipos directivos. A este respecto, ya son varios los equipos directivos, claustros y AMPAS que se están movilizando para reivindicar mayores medidas de seguridad, como en el IES Azucarera, el IES Avempace o el IES Clara Campoamor en Zaragoza, así como el IES Conde de Aranda de Alagón. En esta situación es necesario que el conjunto de la comunidad educativa defienda unas condiciones de trabajo seguras, por lo que animamos a todos los centros a mostrar su malestar.

Ante la evolución pandémica, consideramos que es urgente que el Departamento aplique de una vez por todas una serie de medidas básicas y fundamentales para procurar la seguridad de las escuelas.

Del mismo modo, es imprescindible que se reduzcan de manera significativa las ratios, se proteja a los trabajadores especialmente sensibles, se dote a todo el colectivo docente de mascarillas FPP2 (las únicas homologadas como EPI), se estableza una mayor coordinación de los servicios médicos y de salud pública, así como se intensifiquen los rastreos y cribados en las aulas.

Felipe Faci debe abandonar la política espectáculo y a afrontar la realidad, implicándose de manera responsable en la seguridad de las escuelas.

Accede a la entrevista a nuestro delegado pinchando en la imagen.