Exigimos la reducción del horario de religión este mismo curso
El Tribunal Supremo de Justicia de Aragón (TSJA) no ha admitido a trámite el recurso presentado por el obispado contra la directiva de la administración educativa aragonesa de reducir el horario de religión de 90 a 45 minutos semanales en Infantil y Primaria. De esta manera se la sentencia del mismo TSJA de julio de 2017 se hace firme.
Desde CGT seguiremos luchando por la salida completa de la enseñanza de las diferentes religiones del horario lectivo en la escuela, pero celebramos que se reduzca el tiempo escolar dedicado a la religión, como otras comunidades autónomas han hecho desde hace tiempo sin que haya mediado demandas judicales contra este hecho.
CGT condena que gracias a permisividad del TSJA los y las escolares aragonesas hayan tenido que sufrir durante dos años la materia de religión, merced a las medidas cautelares que obligaban a mantener los 90 minutos semanales para el adoctrinamiento religioso o su alternativa de valores. Lamentablemente esas medidas cautelares han retrasado dos cursos el que los niños y niñas aragonesas dispongan de una hora lectiva más para materias que no segregan por creencias religiosas de las familias.
Instamos a todos los centros que pongan en práctica inmediatamente el horario con 45 minutos para la religión, y que no esperen al próximo curso para hacerlo, ya que estos dos últimos años los motivos organizativos no parecieron importar cuando se tuvo que ampliar el horario una vez iniciado el curso. Y en la misma línea exigimos al departamento de educación que pongan todas las facilidades para relizar el cambio horario este mismo curso.
Por otra parte desde CGT queremos recordar al Departamento de Educación que los centros no podrán disponer de las sesiones de autonomía de centro para aumentar así el horario de la asignatura de religión a 90 minutos, ya que, como dice la normativa, esas sesiones deben ir destinadas al desarrollo de planes de mejora y a la prevención del fracaso escolar, algo en lo que la materia de religión poco tiene que aportar. Exigimos que la administración educativa deje este tema claro a todos los centros sostenidos con dinero público (públicos y concertados), y estaremos vigilantes para denunciar cualquier infracción en este sentido.